Longboarding in Hawaii

Por fin conseguimos hacer surfing in Hawaii. Por supuesto y como comprenderéis no era el día de las olas grandes en Pipeline. Fue el día anterior y la verdad es que había muy poca cosa por no decir nada.. Es cierto que para intentar hacer longboard y aprender con que haya apenas un poco de ola, incluso espuma es suficiente para ponerte de pie, si lo consigues intentar mantener el equilibrio y poder juguetear un poco antes de caerte al agua.

Estoy contento no sólo por la experiencia que fue increible. He surfeado en Hawaii!! La verdad que en mi vida sólo he intentado hacer una vez longboard en La Zurriola en ayuda de mi amigo Telmo que fue quién me enseñó. Intentando explicar lo que Telmo me enseñó en su día y aplicándome el cuento conseguimos disfrutar cada uno de unas pocas olas a la vez que una bella puesta de sol adornaba el horizonte waikikiano.. De verdad os digo, no hay nada como las puestas de sol de Hawaii. He tenido la oportunidad de disfrutar de esos momentos en varios puntos del planeta pero os aseguro que todos son especiales y bonitos pero como la magia que tiene Hawaii no la tiene ninguno. Ese ritual que os contaba en anteriores posts que consiste en que todo el mundo se detiene durante 25 minutos, se acerca a la playa, contempla el horizonte y da gracias por el día que ha pasado y una vez que el Lorenzo se acuesta y Catalina se despierta todo el mundo silva, aplaude y se abraza..es indescriptible.


La verdad que cuando vuelva, tengo ganas de reencontrarme con mis amigos que practican casi a diario este deporte; Alex, David y Telmo, y poder disfrutar con ellos de esa sensación que sólo se siente cuando estás ahí en ese momento. Os recomiendo a todos que lo intentéis alguna vez, el longboard es más fácil de lo que parece, de verdad.