30 enero, 2008

MIKA

El pasado lunes 28 de Enero tuvo lugar el concierto de Mika en el prestigioso y gigantesco estadio de los Montréal Canadians; no es otro que el Bell Centre. Un estadio de Hockey dotado de las últimas tecnologías, cubierto por supuesto y con capacidad para albergar 20.000 supporters.

El lunes fue un día duro. Tuve un examen a la mañana (por cierto me fue bastante bien) y por la tarde una presentación en francés (hemos sacado por fortuna muy buena nota). Desde hace varios días sabía que ese día era el concierto de Mika. La verdad que en un primer momento ni me había planteado ir. No es un grupo que tampoco me atraiga excesivamente. Antes de comer no sé por qué le pregunté de repente a Loïc, mi compañero de piso francés si le apetecía ir (sólo no me apetecía ir) y él respondió encantado. Una vez comentado el plan ya no podía echarme atrás. Después de haberlo comentado con unos amigos sobre si ir o no decidí animarme. Al fin y al cabo no dejaba de ser un espectáculo al más estilo del Britanic Pop y una experiencia más en esta querida tierra. Las entradas no eran muy caras y todavía quedaban.

Seguidamente después de la presentación, nos fuimos directos al concierto y antes de llegar una emoción como cualquiera que va a ver algo diferente, o va a hacer algo diferente se hacía con mi cuerpo. Una vez ya dentro, unas 12.000 personas albergaban el recinto. Mika comenzó el concierto con sus canciones más lentas a piano. En primer lugar, comentaba con Loïc que me parecía raro que no hubiese un telonero ni nada por el estilo. 30 minutos más tarde Mika dejó de tocar y en cuestión de segundos el escenario se lleno de staffs. En breves instantes montaron un escenario nuevo plagado de todo tipo de instrumentos. Para nuestra sorpresa, salieron 4 artistas a cantar unas canciones; 2 chicas y 2 chicos. No eran otros que los teloneros. Unos teloneros con mucha energía (perdonarme que no me sepa el nombre) y mostrando un estilo electro-gótico (Goldfrapp puede ser un ejemplo; teloneros de los grandiosos Coldplay durante su última gira llamada X&Y) hicieron vibrar al público presente.

Media hora después, la historia se repetía. Staffs trabajando sin parar evitando alargar la espera del público impaciente por volver a ver a Mika. El público se mostró exhausto, eufórico cuando escuchó las primeras canciones de uno de sus grande y mundialmente conocido Relax (Take it easy). A primera vista y no estoy muy seguro del todo pero me pareció demasiado perfecto como para ser directo.. Sí que es cierto que Mika premió al público de nuevo con esta canción haciendo un Bis que ese si que era en directo asegurado. La fuerza que tiene esa canción y la altura de las notas a las que llega hacen que se note mucho la diferencia (el tipo tiene una gran voz pero no deja de ser directo). A su vez cantó una canción que según le pude entender en francés (vivió de pequeño en francia y habla francés perfecto) sus productores le habían prohibido cantar en EE.UU.


En cuanto al concierto, destacar el principio a piano me gustó mucho y tiene un muy buen directo. Lo dió todo en el escenario sin parar de bailar y moverse de un lado para otro haciendo participar constantemente al público. En cuanto a la puesta en escena, fue mejorando por momentos y acabó como podéis observar en la foto. En mi opinión le faltó soporte visual de grandes pantallas como nos tiene acostumbrados en Europa y fondos llenos de flores del estilo ochentero que tanto le gustan. No sé si el motivo se debe a que se está promocionando por Norte América y no ha cosechado el éxito que ha tenido en Europa.

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